Los transportistas de vehículos ligeros han convocado una manifestación y marcha de camiones para el 20 de febrero en Madrid, que se enmarca dentro del calendario de movilizaciones con el objetivo de defender su “supervivencia” y mostrar su “absoluto” rechazo al proyecto de ley promovido por el Gobierno central sobre la reforma de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres, ha informado este sábado la Federación de Organizaciones de Transportistas de la Comunidad de Madrid (FENADISMER) en un comunicado.Para llegar a esta decisión, este sábado se ha celebrado en el Auditorio principal de UGT, situado en la Avenida de América de Madrid, la asamblea abierta de transportistas de vehículos ligeros, convocada por la Asociación de Repartidores de Prensa y Revistas de Madrid (ARPPR), la Agrupación de Transportistas de Getafe (ATG), la Asociación de Transportistas Autónomos (ATA), la Federación de Organizaciones de Transportistas de la Comunidad de Madrid (FENADISMER Madrid), la Unión de Pequeños Autónomos del Transporte, de las Comunicaciones y del Mar de Madrid (UNIATRAMC) y la Asociación de Transportistas Discrecionales de Mercancías (TRADISMER), todas ellas asociaciones representativas de transportistas de la Comunidad de Madrid.Como indica el comunicado, los asistentes a la asamblea han analizado las “dramáticas” consecuencias que va a ocasionar en su actividad económica y laboral el proyecto de modificación de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres que ha elaborado el Gobierno central, actualmente en trámite parlamentario.En ella, a juicio de los asamblearios, se establece una nueva regulación para el transporte ligero que en la práctica va a suponer la “desaparición de los miles de transportistas que actualmente trabajan en dicho ámbito” para ser sustituidos por “personas ajenas al sector, que trabajarán en régimen de economía sumergida y sin ningún tipo de control de su actividad, con los consiguientes perjuicios para la seguridad vial”.Los asistentes a la asamblea han coincidido en que con este proyecto el Gobierno defiende “una vez más” los intereses económicos de los “grandes empresarios y las multinacionales” y, por contra, ataca a un “colectivo social conformado por más de 45.000 autónomos y pequeños transportistas”, lo que, según ellos, resulta “absolutamente” injusto y “más aún” en la actual situación económica.Está previsto que esta manifestación y marcha de camiones por la capital culmine frente al Congreso de los Diputados.
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