- Repsol (75,2%) y Cepsa (18,2%) se reparten casi todo el sector
- El precio depende materias primas, comercialización y aplanamiento
- El Supremo falló contra este último factor de cálculo
El Gobierno modificará el sistema de fijación de precios de la bombona de butano y congelará su coste durante el primer trimestre del año para evitar que los consumidores sufran un incremento del 18,56% como consecuencia de la aplicación de una sentencia del Tribunal Supremo (TS) relativa al factor de aplanamiento.
Así consta en la Memoria del análisis de impacto normativo del decreto ley de Mejora de gestión y protección social en el Sistema Especial para Empleados de Hogar y otras medidas de carácter económico y social, a la que ha tenido acceso y que recoge la congelación de precios anunciada por el ministro de Industria, José Manuel Soria, afirmó el pasado 27 de diciembre.
En declaraciones a los medios a su llegada a una comparecencia en el Congreso, Soria afirmó que el precio del butano y del gas licuado del petróleo (GLP) no se incrementarían en 2013. "El butano no va a subir y el gas licuado derivado del petróleo tampoco va a subir", afirmó de forma tajante.
Congelación de precios
Así, el último decreto aprobado por el Ejecutivo en 2012 incluye un artículo en el que se establece que el precio máximo de venta, antes de impuestos, de los gases licuados del petróleo en envases de capacidad de entre 8 y 20 kilos, excluidos los envases de mezcla para usos del GLP como carburante, serán los aplicados desde el 1 de octubre de 2012.
"La medida propuesta congela el precio sin impuestos, por lo que el PVP sólo se vería incrementado en la parte correspondiente al impuesto especial de 15 euros por tonelada, lo que se traduce en un incremento del 1,4% del PVP equivalente a 0,23 euros por botella", precisa el documento.
De esta manera, el Gobierno pretende evitar que el precio de la bombona aumente 3,1 euros, hasta alcanzar los 19,20 euros, lo que supondría un incremento del 18,56% respecto del anterior precio máximo vigente. Parte de esa variación se justifica por el incremento del 40% en el coste de la materia prima (propano y butano).
Nuevo sistema
No obstante, esta congelación se aplicará únicamente entre el 1 de enero y el 1 de abril, tiempo durante el cual el Gobierno pretende "mantener constante" el coste de las bombonas de butano para "limitar el impacto" de la subida en los consumidores de esta fuente de energía, que son un "colectivo especialmente vulnerable".
En este tiempo el Gobierno pretende "aprobar una nueva fórmula de determinación de los precios", que hasta ahora se regía por un sistema automático basado en los costes de la materia prima y flete(50% del total) y otro de costes de comercialización (50%), más un factor de aplanamiento introducido en 2009 para "hacer depender el precio de un trimestre del precio de los trimestres anteriores" y "evitar la alta volatilidad" del precio final.
La Asociación Española de Operadoras de Gases Licuados del Petróleo (AOGLP) recurrió ese factor de aplanamiento ante el TS que, en junio de 2012, estimó en parte el recuso y declaró nula orden por la que se introducía ese factor. Por eso, en los precios fijados el 1 de octubre para el último trimestre del año ya no se aplicó la fórmula.
El Gobierno considera necesario mantener este sistema de fijación de precios "en tanto las condiciones de concurrencia y competencia en este mercado no se consideren suficientes", requisitos que aún no se dan a la luz de que Repsol (75,2%) y Cepsa (18,2%) se reparten todo el sectorsin apenas cambios en la competencia desde 1998, según el propio Ejecutivo.
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